top of page

Xio y Xiqui. Las bodas en otoño son preciosas

A veces ocurre (y no en pocas ocasiones) que llegamos a un conocimiento, complicidad y confianza tales con nuestros clientes (qué raro se hace llamarles clientes, porque acaban convirtiéndose en muchísimo más que eso!) que los resultados de nuestro trabajo, van mucho más allá de lo que en un inicio imaginamos, tanto ellos como nosotras mismas.

Esto es lo que nos pasó con Xio y Xiki… y vamos a intentar explicaros cómo fue su boda con ayuda de la fotografía de Blanca Gaig.

Aunque la boda era a mediados de octubre, amaneció un día como de verano y todo se puso en marcha en casa de la novia. Todos estaban emocionados, era la primera hija que se casaba de la familia, y hasta los hombres de la casa lo prepararon con ilusión.


DSC_5302

La novia, una chica divertida, alegre, y con unos ojazos verdes estaba preciosa con su vestido diseñado por Jordi Anguera que complementó con unos zapatos dorados Lodi, su anillo de pedida que tenía una esmeralda como protagonista (nos encantó!) y un tocado hecho especialmente para la ocasión por María de Lamágora.

DSC_5388
DSC_5845

Junto con Moshi ideamos un ramo para ella tan campestre que pareciera que lo acababa de coger del campo con los tonos que habíamos pensado para toda la boda.


DSC_5994 copy

El novio nos sorprendió saliendo a correr el mismo día de la boda como si de un día más se tratara… aunque no tenemos fotos de ello, Ensu se encargó de inmortalizar el momento en vídeo, así que os lo enseñaremos en cuanto esté listo!

La ceremonia tuvo lugar en el Monasterio de Valldonzella de Barcelona, una iglesia muy especial para los novios. La decoramos con unas guirnaldas de boj natural que colocamos en las barandillas y el altar, y recipientes de zinc antiguos llenos de paniculata blanca, que ya anunciaban el estilo del resto de la boda. Además, preparamos unas cestitas con conos de papel llenos de arroz que los niños repartieron a todos los invitados.


IMG_0721 copy
DSC_6438 copy
IMG_1097 copy

Los novios buscaban una celebración familiar, entrañable, acogedora… en la que, aunque hubiera muchos invitados, todos y cada uno se sintieran cuidados, mimados, y disfrutaran todos por igual, mayores, jóvenes y pequeños.

Así que, con La Centenaria como marco para la celebración, lo ideamos todo. Mientras los novios paseaban por sus jardines y se fotografiaban junto a su huerto, los invitados encontraban la bienvenida que Le Chef catering había preparado a base de aguas de diferentes sabores y los buffets de aperitivo que les caracterizan.


DSC_6732 copy
DSC_6805 copy
IMG_1210 copy

Para que los invitados pudieran encontrar sus sitio en las mesas del banquete, colgamos del cedro centenario de la casa un montón de pizarras con los nombres de las mesas y los invitados que iban en cada una de ellas. Los nombres de las mesas eran etapas del Camino de Santiago, ya que tenía un significado especial para los novios.


Toda la boda la ideamos entorno a un estilo campestre, que congeniaba perfectamente con la casa, y la decoración la ideamos en tonos blancos, verdes y morados ya que empezaba el otoño. Decoramos el techo de la pérgola con banderines hechos especialmente para la boda, una de las cosas que le hacían especial ilusión a la novia.


DSC_7118 copy

Los centros de mesa estaban compuestos por flaneras de zinc y cestitas de mimbre que contenían un arreglo floral en los tonos y estilo de la boda. La composición quedaba completada con una minuta escrita a mano sobre una pizarrita de fondo gris que a su vez hacía de mesero anunciando el nombre de cada mesa.


Todo el material de menaje lo escogimos teniendo en cuenta el colorido y materiales escogidos para el resto de la decoración. Por eso los vasos de agua eran en cristal gris y los bajo platos de mimbre. De esta forma todo mantenía una línea acorde con el estilo de la boda dando un toque especial y diferente.

La madre de la novia, escribió unos libritos siguiendo el hilo del «Camino de Santiago» con 10 consejos para recorrer un buen camino en el matrimonio. Cada pareja tenía uno en su sitio.


DSC_7112 copy

Todos los amigos «casaderos» de los novios tenían sobre la mesa unas cucharas de madera pintadas como unos novios. Los hicimos entre la novia y nosotras, y tuvieron mucho éxito!

Después de la comida y los postres, los cafés se sirvieron en buffets en el jardín. Al salir, los invitados encontraron, además de las barras de cafés e infusiones, varias sorpresas que habíamos preparado para ellos.


IMG_1450 copy

Un «rincón del veterano» con sus licores, vasos y copas de balón, para que, tal y como decía nuestro cartel «Reservado: padre de la novia y amigos» se sintieran como en casa.


DSC_7746 copy
DSC_7751 copy

Y un photocall compuesto por marcos que colgaban de los árboles y atrezzo para disfrazarse de novia y novio que dió mucho juego a la noche.


DSC_7766 copy
DSC_7764 copy
DSC_7856 copy

DSC_8652 copy
DSC_8646 copy

El baile empezó al aire libre con el vals de los novios, y continuó hasta bien entrada la noche. Dando fin a este precioso día y a la vez comienzo de una nueva historia…


DSC_7956 copy
DSC_8090 copy

Who’s next? ;)

Para ver más, pasaros por detallerie.com y encontraréis un reportaje más extenso de esta preciosa boda. ;)

bottom of page